La venta de Isagén por parte del Gobierno Nacional es un gran error económico y financiero. Primero porque Isagén es una empresa rentable que da unos ingresos estables e importantes a la Nación. En el momento en que la vendan, el Estado va a prescindir de esas entradas para siempre. No volverá a ver un peso de dividendos.
El eje de la demanda que nosotros hemos puesto es que el Gobierno estaría violando la Regla Fiscal con esta venta.
Un segundo error en la venta de Isagén es el destino que le tienen a esos recursos. Es una mentira lo que dice el Ministro de Hacienda que los recursos van para las 4G. Esos recursos se van a utilizar para apalancar créditos para los concesionarios de 4G, con plazos de ocho años y un riesgo de pérdida de esos recursos del 30%. Con esos cinco billones quieren armar un patrimonio autónomo con la Financiera Nacional y buscar más recursos para ayudarles a sus amigos los concesionarios.
El tercer punto es que Isagén sigue siendo estratégica como generador de energía limpia. Y es la única que ha seguido ampliando la red eléctrica, ejemplo Hidrosogamoso. Cualquier empresa china o canadiense que se quede con Isagén no va a seguir invirtiendo.
Isagén es el motor de la inversión de 4G en materia energética y su venta será supremamente grave para el país.